DOBLETE DE MACARENOS

Día 23 de Diciembre de 2007 en Valverde del Camino. Huelva. Club Montero los Independientes.

Como todos los domingos, antes de iniciar la montería, nos reunimos en el Bar de la Sociedad para hacer el sorteo previo. Desde que pude ser socio de esta sociedad local suelo ir con mi suegro y su grupo de amigos, todos superan los setenta años pero sin duda alguna la sabiduría y el saber hacer de todos han terminado por "engancharme" a tan magnífico grupo de amigos. Sobre las ocho de la mañana nos apuntamos y pagamos la cuota (15 euros) para tener derecho al sorteo, somos unas ochenta personas los que participaremos este domingo y siete rehalas. La mancha a batir la llaman "Los Ramos" típica de estas tierras de dehesa, muchas encinas, algunos eucaliptos y una ribera que bordea la mancha. Buena de cochinos y algunos venados pero principalmente jabalíes. 

El día amanece radiante, aunque hace algo de frío por estas tierras es soportable y tras el sorteo cojo una papeleta con el número 8 en la armada "Guijarro/Ratera" y el postor Miguel Bermejo (todavía guardo dicha papeleta). Se pueden tirar jabalíes, venados y ciervas de descaste. Somos diez puestos en dicha armada y tras dejar los coches y siguiendo al postor nos vamos colocando. Antes de llegar a mi postura mi suegro con ayuda del postor me indican como mejorarme sin perjudicar a los puestos colindantes a mi derecha e izquierda. La postura tiene buena visibilidad, estoy situado en una orilla de la ribera, al frente una mancha espesa de jaras y algunas encinas y por la parte trasera eucalipto y más jaras. 

Aunque siempre llevo la mira telescópica si el tiradero no supera los 100 metros ni la coloco pues con el alza de batida y el rifle que utilizo (Browining Bar ll) es suficiente. A mi derecha el número 9, un chaval joven que pronto empezará a tirar a todo lo que se meneaba por allí, creo que pegó 20 o 30 tiros a ciervas, total 5 o seis ciervas a las que le pegaba dos y tres tiros. A mi izquierda uno no tan joven con su mujer que además no paraban de hablar y hacer comentarios que aún estando separados algo más de 100 metros los oía perfectamente y me tenían algo mosqueado.  

A media mañana y después de haberme encarado a quince o veinte ciervas sin dispararlas se escucha en la mancha "guarro, guarro a puerta" y ya os podéis imaginar, todos los sentidos centrados en los movimientos de la mancha. A unos doscientos metros y delante mía en plena mancha se escucha el movimiento de perros y cuando me doy cuenta de frente y cruzando de mi izquierda a derecha un guarro enmontado y seguido de perros, lo veía pero a ráfagas. A unos cuarenta o cincuenta metros tenía que pasar un cortadero limpio y ahí lo estaría esperando....Llega lo espero, lo sigo y pummmm....caé seco rodando hacia abajo, los perros saltan por encima de él hasta que retroceden al no encontrarlo y se ceban con él....Espero unos minutos y me acerco acaricio a los perros y los echo suavemente. Veo el guarro y cual es mi sorpresa que se trataba de un digno macareno con un tiro colocado en todo el codillo. Simplemente espectacular.... . Inmediatamente vuelvo a mi postura pues la montería no ha terminado.

Tanto la puerta de mi izquierda como la de la derecha vieron el lance dándome la enhorabuena. Después de este momento lo único que esperaba era que terminase la montería y avisar a mi suegro para enseñarle el macareno y hacerme las fotografías de rigor y como no, dejarme felicitar por su grupo de amigos. No obstante observaba mucho al puesto de mi izquierda porque no paraba de moverse hacia atrás como si oyese algo por allí y el chaval de mi derecha a lo suyo, cierva que pasaba cierva que tiraba. Algo que a mi particularmente no me hace ni pizca de gracia aunque comprenda la necesidad de abatirlas para costear los gastos sociales de las monterías. Siendo ya la hora de que nos recogiese el postor, sobre las dos y media de la tarde, por el rabillo del ojo noto que algo sale por mi izquierda desde detrás a escasos veinte metros del puesto de mi izquierda que hablando y recogiendo los trastos con su mujer no se percataron del guarro que salia desde detrás y que llevaba allí toda la montería observándonos y esperando el momento de volver a la mancha cruzando velozmente la ribera........Lo dejo pasar la ribera y antes de taparse con unas dunas de arena y justo antes de entrar en la mancha le suelto una ewo 180 grains (30.06), visto y no visto pues se tapó con las dunas de la ribera. Al instante y tras la detonación el puesto de la izquierda me decía a que le había tirado y de pronto salen unos perros que venía de atrás corren en dirección a la trayectoria del guarro y antes de pasar la ribera se paran a la la altura de la duna, salgo corriendo y allí estaba...otro macareno y este más grande que el anterior...con otro tiro en el codillo, aunque un pelín algo más alto que el anterior, pero letal.....

Os podéis imaginar el momento, casi me caí corriendo hacia la duna para ver que tenían los perros y allí estaba. Dos tiros, dos macarenos en el mismo día....Nunca se había matado dos macarenos así en una puerta, la fotografía del momento está en el salón de actos de la citada sociedad y mi suegro más orgulloso de mi que si los hubiese abatido él. 

Desde entonces tengo una tablilla doble en el centro de mi pared que cuando la miro me hace recordar el lance.

Es este lance el que, desde estas tierras del suroeste de España, quiero dedicar a este magnífico foro de amantes de las esperas que ante todo posee un equipo cojonudo. y como no, a la cuadrilla de mi suegro del Club Montero los Independientes de Valverde del Camino. Huelva.